CARICIARTE, Taller de Psicoerotismo

Espacio de Crecimiento Personal

jueves, 6 de enero de 2011

EL ESPACIO Y EL FREGADERO

ESPACIO

Para experimentar el espacio abierto, aéreo, se debe también experimentar la solidez de la tierra, de la forma, pues ellas son interdependientes. No es raro que tengamos una concepción romántica del espacio abierto, y después caigamos en las trampas. En tanto que abandonemos todo romanticismo en cuanto al espacio abierto como lugar maravilloso, si no que, más bien, conectemos este espacio con la tierra, evitaremos las trampas. No se puede experimentar el espacio sin delimitarlo con los contornos de la tierra. Si queremos pintar un cuadro del espacio abierto, debemos expresarlo con relación al horizonte de la tierra. Así que debemos reducirnos a los problemas de la vida cotidiana, a las historias de cocina y fregadero. Esta es precisamente la razón de la que simplicidad y la precisión de las actividades cotidianas revista una importancia tal. Si percibimos el espacio, abierto, reduzcámonos a las situaciones familiares de la vida, a las viejas situaciones claustrofóbicas, mirémoslas más de cerca, examinémoslas, absorbámonos en ellas, hasta que el absurdo de su solidez nos salte a los ojos, y captemos la cualidad espaciosa también en ellas.

Chogyan Trungpa

lunes, 27 de diciembre de 2010

EL FREGADERO Y LAS CACEROLAS

ESPACIO

Para experimentar el espacio abierto, aéreo, se debe también experimentar la solidez de la tierra, de la forma, pues ellas son interdependientes. No es raro que tengamos una concepción romántica del espacio abierto, y después caigamos en las trampas. En tanto que abandonemos todo romanticismo en cuanto al espacio abierto como lugar maravilloso, si no que, más bien, conectemos este espacio con la tierra, evitaremos las trampas. No se puede experimentar el espacio sin delimitarlo con los contornos de la tierra. Si queremos pintar un cuadro del espacio abierto, debemos expresarlo con relación al horizonte de la tierra. Así que debemos reducirnos a los problemas de la vida cotidiana, a las historias de cocina y fregadero. Esta es precisamente la razón de la que simplicidad y la precisión de las actividades cotidianas revista una importancia tal. Si percibimos el espacio, abierto, reduzcámonos a las situaciones familiares de la vida, a las viejas situaciones claustrofóbicas, mirémoslas más de cerca, examinémoslas, absorbámonos en ellas, hasta que el absurdo de su solidez nos salte a los ojos, y captemos la cualidad espaciosa también en ellas.

CHOGYAN TRUNGPA




martes, 16 de marzo de 2010

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